El feminismo en Cuba es retado por procesos culturales típicos de una realidad poscolonial que se debate entre cómo crear un discurso específico, caracterizado por particularismos culturales, y los procesos raciales que colocan el patrón de género de la mujer eurodescendiente en contraposición a la mujer afrodescendiente.
Fronteras, figuras múltiples y otros simulacros
El discurso “político” se vuelve nuestro enemigo. Solo intentar mirarnos en el espejo de la identidad cubana a través del discurso de los artistas nos devuelve una falacia.